El 9 de mayo se declara el Día de la Vergüenza Rusa por el Congreso Mundial de los Ucranianos, la Asociación ConUcrania y Unión Krai.
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El 8 de mayo de 2025, se celebra el 80 aniversario del Día de la Victoria en Europa (V-E Day), una fecha que marca la rendición incondicional de Alemania nazi en 1945 y el fin de la Segunda Guerra Mundial en Europa. Este triunfo no solo representó una victoria sobre una dictadura brutal, sino que también estableció un orden mundial basado en los derechos humanos, la justicia y la paz, garantizando así la estabilidad y la cooperación en Europa durante décadas.
Sin embargo, cada año, el 9 de mayo, la federación rusa distorsiona esta narrativa, promoviendo una visión falsa y militarista de la historia. Lo que debería ser un día de recuerdo y luto ha sido secuestrado por el Kremlin para justificar su agresiva guerra continua en Ucrania. A través de esfuerzos propagandísticos, como las marchas del “Regimiento Inmortal”, el Estado ruso utiliza el recuerdo de la Segunda Guerra Mundial para encubrir sus atrocidades actuales, difundir desinformación y glorificar el totalitarismo.
Bajo el liderazgo de Vladimir Putin, el gobierno ruso ha transformado el pasado en un arma, reescribiendo la historia para glorificar a Stalin, ocultar los crímenes de guerra soviéticos y revivir ideologías imperialistas de dominación. rusia ha tomado la victoria sobre el nazismo, alcanzada con el esfuerzo conjunto de millones, incluidos los ucranianos, y la ha distorsionado para satisfacer sus propias ambiciones militaristas. La federación rusa ha convertido la historia en una herramienta de propaganda, glorificando la represión soviética y encubriendo los crímenes de guerra cometidos por sus fuerzas.
La historia se ha utilizado como un arma para justificar crímenes: glorificación de Stalin, olvido de las atrocidades soviéticas y el surgimiento de una nueva ola de imperialismo. Esta realidad se manifiesta de manera trágica en Ucrania, donde los horrores actuales evocan las páginas más sombrías del siglo XX, tal como lo afirmó el Presidente del Consejo de Ministros, Pavlo Grod. Las asociaciones ConUcrania y Unión Krai en España, lideradas por el presidente Vasyl Tomenko, expresan su apoyo total a la declaración del Día de la Vergüenza Rusa.
Desde Bucha hasta Mariupol, desde Izium hasta el Donbas, las tropas rusas han perpetrado crímenes que conmocionan la conciencia humana: asesinatos en masa, torturas, violaciones, deportaciones forzadas y el secuestro sistemático de niños ucranianos. Estos actos no son casos aislados; son acciones deliberadas de un régimen que niega el derecho de los ucranianos a existir como un pueblo libre e independiente.
El 9 de mayo, el Congreso Mundial de los Ucranianos, en conjunto con Asociación ConUcrania, llama a la comunidad internacional a ver más allá de la propaganda del Kremlin y reconocer la verdad: este no es un día de victoria, sino un Día de Vergüenza. Este es un recordatorio doloroso de que la federación rusa, atrapada en la ideología del “racismo”, se ha convertido en el mismo mal que una vez afirmó haber derrotado.
Llamado a la acción:
Hacemos un llamado a los países democráticos del mundo a:
- Reconocer los crímenes de la federación rusa en Ucrania como genocidio;
- Declarar a rusia como estado patrocinador del terrorismo;
- Condenar la campaña del “Regimiento Inmortal” por glorificar las represiones soviéticas y legitimar la agresión moderna;
- Crear un tribunal internacional especial para investigar y castigar todos los crímenes cometidos por el liderazgo ruso y sus agentes;
- Prohibir cualquier evento o celebración que glorifique el Día de la Victoria de Rusia y justifique la sangrienta guerra de rusia contra Ucrania;
Instamos a los gobiernos, empresas y sociedad civil a que se abstengan de participar en cualquier evento previo al Día de la Victoria de rusia y, en su lugar, declaren el 9 de mayo como el Día de la Vergüenza Rusa.
Mientras un solo ucraniano permanezca bajo ocupación rusa o un solo niño ucraniano secuestrado permanezca en un campo de adoctrinamiento forzado ruso, la misión de justicia permanecerá incompleta. El 9 de mayo ya no debe ser una ocasión para difundir mentiras; este día debe convertirse en un símbolo de unidad mundial para enfrentar la agresión, exigir responsabilidad y defender la dignidad de todos los pueblos libres.

