El bombardeo con cientos de drones y misiles a la capital ucraniana el dia 28 de agosto del año 2025 ha destrozado tanto la sede del British Council como la sede de la Unión Europea. Los ataques son deliberados y con objetivos muy claros, no son daños colaterales fruto de atacar instalaciones militares. Y esto sucede mientras se sigue hablando de la necesidad de un proceso de paz entre Rusia y Ucrania.
Año 2014
Si lo miramos con mucha perspectiva y frialdad, atendiendo exclusivamente a resultados perseguidos, el balanca no puede ser más negativo para Rusia: comenzó en 2014 queriendo anexionarse todo Donbás, Zaporiyia, Jersón y Odesa, además de Crimea, inventándose el concepto de «Nueva Rusia». Tan solo pudo anexionarse Crimea y prqueñas partes de Donetsk y Lugansk. Ucrania, con un ejército de mínimos y un grado de corrupción extremo en las filas militares, Ucrania sin embargo pudo contener a la entonces segunda fuerza militar del mundo. Rusia no podía seguir con su invasión a pesar de tener equipos y soldados, requería cambiar planes, disponer de tiempo y movilizar muchos efectivos, lo que daría motivo quizás para una intervención internacional no deseable. El Kremlin optó por la clásica política de marear el asunto con reuniones y treguas jamás cumplidas mientras seguía comprando voluntades y poderes por media Europa, caso de Merkel, Órban o las entonces incipientes corrientes de extrema izquierda populista que afloraban por toda Europa.
Zelenskyi
8 años después, llega al poder Zelensky, quien apostaba en su programa electoral por no invertir en defensa y hacerlo en otras políticas que generaran desarrollo económico en Ucrania, confiando (o eso se decía) en que eso valdría para hacer que las partes ocupadas por Rusia se sublevaran contra Moscú dado el supuesto mejor modelo de vida ucraniano. Encuentro tras encuentro, conferencia tras conferencia, y declaración tras declaración, quien fuera un popular cómico metido a político entendía que se estaba enfrentando con un gobierno y una sociedad imperalista y belicista que deseaba el exterminio de Ucrania en todos sus órdenes.
Invasion a gran escala del año 2022
en 2022 Putin reinicia la invasión con más fuerza y organización, la que no tenía en 2014, y pretende tomar Kyiv en 3 días para desde allí tomar el poder todo el país, objetivo primigenio de 2014. Sería la segunda Bielorrusia. Ni siquiera declaró la guerra, sencillamente dijo que era una «operación especial», al modo estadounidense cuando Washington decidió invadir Panamá o Guyana. Pero Moscú volvía a pecar de soberbia y siguió sin tener en cuenta la voluntad de los ucranianos. Los 3 días se convirtieron en semanas, luego en meses y ya vamos por años.
Los objetivos no logrados de rusia
Rusia sigue sin lograr sus objetivos iniciales y persiste en su constante fracaso. No tiene conquistado todo Lugansk, tampoco Donetsk, menos aún Zaporiyia o Jersón. Ni qué decir de Odesa que ni lo roza. Y aunque supo y muy bien calcular la cobardía internacional y ofrecer una hipótesis de trabajo donde si el mundo intervenía directamente en Ucrania habría poco menos que una guerra nuclear y el fin de la humanidad, no calculó los efectos colaterales. La OTAN se revitalizó como organización militar y acogió a Finlandia y Suecia como nuevos miembros cerrando por completo la única salida por mar europea que tenía Rusia. Europa se ha mostrado unida y fuerte, aunque se pueda también acusar de cierta lentitud. Para sorpresa de los propagandistas y voceros financiados con rublos, el viejo continente europeo tuvo medios y capacidad de abastecerse sin rusia de gas y petróleo y ni siquiera se «murió de frío» en el invierno de 2023.
Pérdidas rusas
En lo interno, a Putin no le ha quedado más remedio que fortalecer su poder para desarrollar su particular Corea del Norte pero en alfabeto cirílico. Ha perdido más de 100.000 soldados muertos, todos perfectamente identificados con nombres y apellidos. Las estimaciones de caídos rusos se elevan a más del millón. Las sanciones económicas, lentas, tibias y a veces ambiguas en su aplicación, consiguen sin embargo socavar la economía rusa, netamente exportadora, desarrollando por primera vez en muchos años un PIB y balanza comercial negativos con endeudamiento del país. Todo ello teniendo en cuenta que el estado real de la economía rusa, como sucedía con la soviética, es un secreto de estado y está dopada a niveles insospechados.
Ventaja de Ucrania a corto plazo
Si siguen los acontecimientos con una cierta «lógica», todo apunta a que la actual situación, que es de estancamiento, empiece a inclinarse en favor de Ucrania en el plazo de 1-2 años. La experiencia militar, el disponer ya de cazas militares como los F-16 o desarrollar armas de largo alcance y alto poder ofensivo en la propia Ucrania sin depender de terceros, fijan una ruta de desarrollo muy halagüeña. Incluso Zelensky ya no es el joven presidente arrollador y con cierto toque presuntuoso de entonces, sino un símbolo del país que resiste como nadie y permanece unido ante el enemigo común. En Moscú se dan cuenta de esto y entran en la fase de la desesperación, que se traduce en más bombardeos masivos con drones y más centrado en objetivos civiles. Los datos son claros al respecto.

rusia esta perdiendo la guerra
Rusia está perdiendo la guerra. Todos sus ciudadanos lo saben, pero nadie lo quiere admitir. Que Rusia hoy bombardeara dos edificios con esas instituciones tan respetadas internacionalmente es la expresión de la desesperación y el llamamiento agónico de quien se sabe que a la larga será perdedor pero quiere morir matando.
