La sede electoral de Senkevych celebra su victoria. Foto: Yevheniya Dulko
19/11/2015 – Política
Es tiempo de celebración en el equipo electoral de Oleksandr Senkevych, el alcalde de Mykolayiv, un centro regional en el Sur de Ucrania. El director autodidacta de 33 años de una compañía ucraniano-norteamericana derrotó a un miembro de la vieja élite pro Yanukovych y pro rusa que estuvo involucrado en actividades ilícitas en la región, pero que disfrutaba de apoyo oligárquico.
Lo que parecía imposible se hizo realidad en esta otrora ciudad abrumadoramente pro rusa que Putin quiso (infructuosamente) anexar a la «Nueva Rusia» (o Novorossiya) y separar de Ucrania, gracias a su joven y activo equipo de promoción que desafió la apatía política de la región y los viejos trucos políticos.

Conseguir gente nueva que pudiera cambiar el sistema de la política y el poder fue uno de los mayores desafíos de los que apoyaron la revolución Euromaidan de Ucrania, la revuelta popular de 2013-2014 que envió al entonces desacreditado presidente Yanukovych al exilio a Rusia. Los viejos trucos electorales, el populismo, el control de los medios de prensa, y el apoyo financiero de los oligarcas que controlan gran parte de la política de Ucrania, hacen imposible que nuevas figuras políticas entren en escena. La frustración con el gobierno posterior al Euromaidan por la falta de avance en las reformas no sólo llevó a una apatía política, sino a un retorno de las viejas élites políticas de Yanukovych.
Según periodistas locales, el competidor de Senkevych, Ihor Diatlov, ex jefe del Concejo del Oblast, tuvo el apoyo de Novinsky; multimillonario y socio de Rinat Ajmétov, el oligarca más rico de Ucrania, según el medio ucraniano nv.ua. Antiguo miembro del Partido de las Regiones de Yanukovych, Diatlov migró al sucesor de aquel, el Bloque Opositor, compuesto por élites locales que tradicionalmente mantuvieron el poder en el Sur de Ucrania pro ruso.
Cuando Diatlov triunfó en la primera vuelta de las elecciones del 25 de octubre, la población de Mykolayiv a favor de las reformas quedó devastada: fue Diatlov que provocó tensiones sobre las protestas locales de Euromaidan, denunciando que las organizaban «seguidores de Bandera, peligrosos nacionalistas del Oeste de Ucrania». Luego de que Yanukovych huyera, Diatlov renunció. Su repentino retorno marcó el posible retorno del viejo y conocido sistema político que los ucranianos esperaban poder cambiar con el Maidan: políticos populistas con antecedentes penales, que accedían al poder con el apoyo de oligarcas sólo para usarlo en su beneficio y en el de sus patrocinadores.
Afortunadamente, los antecedentes penales de Diatlov (al menos nueve asesinatos y cuatro allanamientos están asociados con su nombre) le hicieron un favor a Senkevych. Los residentes de Mykolayiv de diferentes clases se unieron para hacer todo lo posible para que Senkevych, miembro del partido Samopomich encabezado por Andriy Sadovyi, el alcalde de Lviv la ciudad más europea del Oeste ucraniano, fuera elegido en la segunda vuelta.

El equipo de publicidad de Senkevych trabajó para desafiar el impacto del periódico local gratuito de Mykolayiv controlado por Diatlov, panfleto propagandístico contrario a Senkevych, y su programa populista: la promesa más importante era rebajar las tarifas de energía, una de las medidas impopulares que el gobierno posterior al Euromaidan implementó en el subsidiado sector energético de Ucrania.
Sólo el 34 % de los residentes de Mykolayiv fue a votar en la primera vuelta de las elecciones en las cuales ganó Diatlov. De acuerdo con Senkevych, en su mayoría fue la gente joven quien se abstuvo de ir a votar. Una campaña de movilización iniciada por Anna Shparenko instó a los estudiantes universitarios a acudir a los centros de votación. Como resultado de ello, la participación se elevó al 38% en la segunda vuelta.
Mostrándose con carteles a lo largo de las calles de Mykolayiv durante varias mañanas, los adherentes de Senkevych, viejos y jóvenes, dieron un mensaje alternativo a las abundantes carteleras desde las cuales Diatlov prometía bajar tarifas a la mitad instando a sus camaradas de Mykolayiv a escoger el futuro (todas las fotos son de Anastasiya Shcherbynina):
Tras la primera vuelta electoral, unos 50 emprendedores de Mykolayiv se agruparon para trabajar en la campaña de Senkevych. Algunos trajeron impresoras, computadoras, máquinas de café. Un hombre de negocios proveyó espacio publicitario, otro pagó el material impreso para repartir. También se juntaron $ 20.000 en donaciones.
Oleksiy, junto a sus colegas de la agencia de tecnología política Dustin Hoffman, trabajaron como voluntarios en el equipo de Senkevych. La campaña de bajo presupuesto fue armada sobre el principio de crear una red de voluntarios sobre la base de una red de mercadeo. La sede central de Senkevych consultó e instruyó a sus seguidores para movilizar a aquellos que no tenían pensado votar en la segunda vuelta: ven tú y trae otros 10.
«Les pedimos a nuestros voluntarios que crearan listas de amigos y familiares para hablar con ellos y convencerlos. Y, antes de la elección, recordarles que debían ir a votar», dijo el equipo de Senkevych de acuerdo con el medio ucraniano Ukrainska Pravda.
Como resultado Senkevych ganó con el 54% de los votos, contra 43% de Diatlov. La periodista ucraniana Anastasiya Ringis apodó este sorprendente giro de los hechos «el milagro de Mykolayiv».
Ahora Senkevych enfrenta un duro desafío: trabajar con la mayoría del Bloque de la Oposición en el ayuntamiento. No obstante, sus planes son prometedores.
Las segundas elecciones poseuromaidán en Ucrania, que concluyeron el 15 de noviembre de 2015, fueron catalogadas como decepcionantes por los observadores occidentales y por los propios ucranianos. Solamente un 34% de aquellos en condiciones de votar lo hicieron por funcionarios locales – una diferencia significativa con la primera elección posterior a Euromaidan el 24 de octubre de 2014 con el 52% de concurrencia, que llevó a la creación del gobierno de coalición del presidente Poroshenko y el Primer Ministro Yatseniuk, comprometido con las reformas. Apenas después de un año, la frustración por la falta de avance de las mismas, llevó no solo a la apatía, sino también a un retorno de las viejas élites políticas pro Yanukovych que fueron reformuladas y pasaron a ser el nuevo bloque de la oposición.
Fuente: Alya Shandra, Euromaidan Press, 19 noviembre 2015