¿Ha habido otros acuerdos de paz previos entre Ucrania y Rusia?

Encuentros de Minsk: 

desarrollados en la capital bielorrusa a raíz de la primera invasión rusa a Ucrania en 2014. Tuvieron, por decirlo de alguna manera, dos fases. Una primera que podemos llamar 

  • Minsk 2014 donde se buscó en esencia detener los combates, intercambiar prisioneros y buscar una solución pacífica. Se firmó el 5 de septiembre. Fue imposible de llevar a cabo. En esta fase se desarrolló la narrativa que todavía se sigue repitiendo desde la propaganda rusa, y es que Ucrania «bombardeaba constantemente población civil en Donbás». La realidad es que la inmensa mayoría de ataques, bombardeos e incluso asesinatos de algunos de los líderes de los entonces conocidos como «rebeldes prorrusos», eran ejecutados siempre por Rusia. Incluso la dirección de los proyectiles apuntaba un origen geográfico opuesto al ucraniano. Otro elemento fue el combate en el Aeropuerto de Donetsk, que se prolongó hasta enero de 2015. Esto último se motivó tras la firma del acuerdo, ya que las tropas ucranianas que ocupaban el aeropuerto querían retroceder, hecho que fue aprovechado por las fuerzas rusas para iniciar un ataque por retaguardia.
  • Minsk 2015: segunda fase de esos encuentros. Se pretendía un objetivo más ambicioso como detener la guerra, intercambio sin límite de prisioneros, indulto para todos los miembros de los movimientos prorrusos en Donbás, estatus específico para el óblast entero de Donetsk y Luhansk, e incluso se contemplaban futuros referendum sobre estas regiones. Estos acuerdos se firmaron no solo entre Ucrania y Rusia, sino también con Alemania y Francia. Todo saltó por los aires no solo por enfrentamientos reducidos en varios puntos de Donetsk y Luhansk sino en particular por el bombardeo a la ciudad de Mariúpol el 24 de enero de 2015 con 30 muertos. Aunque la propaganda rusa intentó culpar a Ucrania, las pruebas apuntaban claramente a Rusia.

Normandía: 

recibió varias denominaciones (cuarteto, encuentros…), y se llamó así por ser este lugar de la primera reunión, aunque se mantuvieron en Italia o la propia Minsk. Sucedió por primera vez el 5 de junio de 2014, como encuentro paralelo a los encuentros de Minsk. Tuvo varias reuniones, en la que se puede destacar la firma en la propia Minsk el 11 de febrero de 2015 de unos principios de acuerdo para reducir el uso de armamento pesado en la línea del frente. Su objetivo pareció encaminarse a consolidar los acuerdos de Minsk y buscar otros como la retirada de tropas para noviembre de 2016.

Formato Steinmeier: 

es heredero de lo anterior, se desarrolló en 2019 y fue una idea del entonces ministro de exteriores alemán que buscaba celebrar elecciones con supervisión de la OSCE y otorgar estatus especial a las zonas ocupadas. El documento fue firmado por Ucrania y por Rusia, pero generó múltiples protestas entre los ucranianos al considerar que se estaba cediendo a Rusia y regalando también Donetsk y Luhansk a los rusos. Otro momento cumbre para la propaganda rusa que acusó de que esas manifestaciones estaban lideradas por partidos e ideologías próximas al nazismo, un relato que la izquierda europea compró con gran entusiasmo sin verificar su certeza.

Cumbre de París: 

celebrada en 2019. Tuvo como participante a un recién electo presidente Zelensky, cuyo programa electoral contemplaba ofrecer una paz al país alcanzando un acuerdo con Rusia donde el gas, así como el alejamiento de posturas defensivas o belicistas de su predecesor Poroshenko, harían que Moscú firmara. Con todo, Zelensky empezó a ver que la posición rusa era siempre inasumible para Ucrania y se empezó a hablar directamente de líneas rojas por parte de Ucrania, comenzando por la petición de federalización del país (es imposible legalmente) y la cesión sin más de territorios ocupados por Rusia. Incluso se mantuvo un encuentro aparte entre Zelensky y Putin en Moscú, sin llegar a acuerdo alguno (19 diciembre 2019). Alemania concedió el famoso Nord Stream 2, justificado en política de buena voluntad hacia Rusia. El tiempo demostró lo falso de ello. Zelensky quiso en 2021 ampliar este formato e incluir a Canadá y Reino Unido en las negociaciones pero sin éxito.

El resto, es historia sabida:

Rusia jamás ha tenido voluntad de negociación más allá de la rendición completa y absoluta de Ucrania y ser asimilado como un territorio ruso más. Un dato importante en todo esto, y que quizás ahora se entienda mejor, es la escasa presencia en estos asuntos de la diplomacia estadounidense. Ni Obama, ni Trump en su primer mandato, ni Biden hasta la invasión a gran escala, mostraron realmente interés alguno en esto a pesar de que en teoría estaba en juego la preponderancia geopolítica de su rival internacional.

Artículo de Héctor Villazala.

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