Los años sesenta del siglo XX no fue simplemente una década. Fue toda una época que empezó en 1956 con el XX Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética que echó abajo el culto a la personalidad de Stalin y se finalizó en 1968 con la ocupación de Checoslovaquia por la Unión Soviética, cuando apareció otra vez el peligro de una guerra mundial y fueron rotas las esperanzas frágiles que nacieron durante del “deshielo”.
Los años sesenta fue una época especial para Ucrania, que ha dejado tras de sí una cantidad enorme de material cultural.
Era una época de movimientos disidentes y recuperación del interés por la cultura nacional, época del arte no oficial y exposiciones ilegales, tiempo de liberación (aunque selectiva y muy breve), que dio un impulso para la renovación de todas las esferas culturales: el cinematógrafo, la literatura, la arquitectura y la música.
El arte monumental soviético (y, en particular, los mosaicos monumentales de Kyiv) ahora para muchos se asocian con carga ideológica, con el pasado gris y triste.
Esto se debe a que las obras del arte monumental soviético se hacían, sobre todo, por encargos gubernamentales, y los artistas que hacían estos trabajos ganaban bastante dinero en el sistema de arte soviético.
Pero la actitud hacia la creación de un mural, mosaico o vitral en el espacio público como a una “chapuza” hay que hacerla para ganar el dinero, se formó más tarde y no era típica para los años sesenta. En este período el arte monumental soviético solo empezaba a desarrollarse, en aquella época era algo novedoso, que solo más tarde será simplificado y estandarizado.
Exactamente esta simplificación, cuando un artista de antemano tenía ya fijados los temas y medíos necesarios para lograr el objetivo, hizo que los artistas dejaran de tomar en serio el proceso creativo.
Pero en los años sesenta esto todavía no había ocurrido y muchos artistas, sin problemas, combinaban su trabajo en el campo del arte monumental oficial con la creación de sus obras nonconformistas.
Los años sesenta era el pique del desarrollo del arte monumental, que era debido en Ucrania, como en toda la Unión Soviética, sobre todo a la búsqueda de un lenguaje artístico nuevo en la arquitectura, en una era de las construcciones tipificadas sin muchos detalles arquitectónicos.
La nueva arquitectura de formas geométricas simples desafiaba a los artistas con nuevos problemas, ofreciendo áreas que había que decorar para preparar el espacio en el cual habitaban las personas, cargado de ideología (por supuesto, obligadamente comunista), pero también de valores universales de la humanidad: de la maternidad, la amistad, el trabajo, el amor por patria, etc.
Con el arte monumental decoraban los jardines infantiles, edificios residenciales, estaciones de bus y metro y hospitales. La forma más popular del arte monumental en Ucrania era el mosaico.
Por lo tanto, el arte monumental de la década de los ’60 cumplía las funciones de la propaganda y al mismo tiempo era innovador desde el punto de vista artístico.
Le sugerimos un pequeño recorrido por los mosaicos más interesantes de Kyiv, creados por artistas ucranianos en la década los ’60, que han sobrevivido hasta nuestros días y están disponibles para el público.
Aeropuerto Boryspil
A los visitantes de la capital de Ucrania una recomendación: si llegan a Kyiv en avión, ¡tómese su tiempo en visitar la terminal B!
Allí, en la fachada izquierda del edificio, frente al restaurante «La granja», puede uno ver los mosaicos más característicos de 1960 «la Paz, el Trabajo y la Felicidad»

Estos artistas se dedicaban a la decoración de la toda terminal, pero después sufrieron una gran reforma, la mayoría de los mosaicos fueron derribados. Hoy en día es imposible apreciar un diseño completo de todo el complejo.
Se ha conservado también la obra «Ícaro», en la sala de espera de la terminal B.
La composición del mosaico se divide en tres grupos de personas, que incorpora la idea del trabajo en sus diversas manifestaciones: el agrícola, el industrial y el intelectual.
Naturalmente el mosaico muestra la imagen próspera de la RSS de Ucrania, cuyos habitantes encuentran la felicidad y la paz en el trabajo.
Metro de Kyiv
Utilizando la decoración del metro de Kyiv como ejemplo, se pueden apreciar dos diferentes tendencias del desarrollo del arte monumental de este período.

Por un lado, para decorar el interior de la estación de metro «Khreshchatyk» (1960) los artistas O. Grudzinskaya, T. Samsonova y A. Fedorova utilizaban como base la ornamentación popular ucraniana, creando unos paneles decorativos que decoraban los pilones de la estación.

Y por otro lado, en el interior de la estación de metro «Shulyavska» (1963) se puede ver la composición «el Trabajo Industrial», que representa dos figuras, una la de trabajador joven y otra de un trabajador de más edad, frente de bandera roja. Simboliza la idea de la continuidad de las generaciones.
Avenida de la Victoria, 1967 – 1968
Edificios Nº 21 y 23
Como se mencionó anteriormente, la decoración con mosaicos se desarrolló como respuesta a la necesidad de decorar las construcciones. Un ejemplo notable de esto es la decoración con los mosaicos monumentales de los edificios en la avenida de la Victoria.


Palacio de los Pioneros, 1965
Los mosaicos del Palacio de Pioneros, creados por artistas de renombre, Ada Rybachuk y Vladimir Melnichenko, fueron inspirados por las pinturas de María Prymachenko, estas obras impresionan con sus imágenes llamativas y rico colorido.

Estación de autobuses, 1961
También fue decorado por los artistas Ada Rybachuk y Vladimir Melnichenko.
El ritmo de todo el edificio de la estación de autobuses lo marca el color. La decoración empieza con azulejos de color turquesa que recubren las columnas en la primera planta y que, literalmente, se disparan a través de tres pisos, convirtiéndose, en la última planta, en una composición monumental que ocupa toda una pared.

La superficie de las paredes están revestidas con azulejos de color negro brillante con las líneas contingentes de baldosas blancas y turquesas, que marcan con siluetas en movimiento los autobuses y los coches.
En este esquema de flujo de tráfico ininterrumpido, se va introduciendo la imagen mosaica de la ciudad.
Fotos de Eugenio Nikiforov
Por Tatiana Kochubinskaya, hisoriadora del arte
Fuente: Ukrainska Pravda