Danza contemporánea ucraniana: Apache CREW

Mis amigos, cuando me ven bailar, me dicen muchas veces que me muevo como una chica del Este (con lo que quieren decir que lo hago con la gracia de un robot). No sé a qué viene este tópico de que la gente del Este baila igual de mal que yo, pero, desde luego, no es así en realidad.

Ucrania tiene una importante escuela de baile clásico, ballet, y también una larga tradición de bailes populares, como por ejemplo el gopak.

Hoy, os quiero presentar un grupo de danza contemporánea que se llama Apache CREW. Personalmente, a mí me encanta y espero, algún día, poder verlos actuar en directo.

Anatoliy Savichko es bailarín, coreógrafo, líder y uno de los creadores de este grupo. Como cuenta en la entrevista a Styleinsider, empezó a estudiar danza con tan solo cuatro años de edad en una escuela de baile tradicional ucraniano. Cuando Tolik llegó a la edad de un adolescente empezó a interesarse por otros estilos de danza y desde 2011 empezó a organizar unas pequeñas actuaciones junto a 4-5 amigos.

La siguiente actuación de Apache CREW está filmada en uno de los patios descuidados de Kyiv. Las imágenes de fondo me traen mucha nostalgia.

¿Por qué me estás haciendo esto?

La actuación empieza con una cita de Psicosis, Hitchcok: «Todos estamos atrapados en nuestras trampas privadas y ninguno de nosotros nunca podrá liberarse».

«Al principio hacía las actuaciones con amigos o personas que conocía en el trabajo y durante mis estudios. Poco a poco, empezó a participar más gente y en septiembre de 2014 decidimos tomarnos el asunto más en serio y crear un equipo de 16 personas con las que queríamos ganar el concurso “El mejor grupo del país”.

Entonces, estábamos centrados en hacer un show, un espectáculo de calidad para conseguir la victoria. También queríamos enseñar que en Ucrania existe el formato de danza contemporánea. Cuando empecé con todo esto, solo tenía una visión confusa, no sabía cuál iba a ser el resultado, todo depende mucho de las personas que están dentro del equipo, de su propio estilo y su forma de bailar. Lo principal fue que ellos querían crear junto a nosotros. Como resultado nació nuestro grupo Apache CREW. Hoy en día, nuestro grupo está formado por 38 personas».

¿Qué es todo este lío?

«Mi objetivo es asegurarme de que todos los miembros del equipo puedan expresarse. Cada miembro está en el equipo por una razón, cada uno tiene su propio poder que no puede permanecer oculto, es necesario compartirlo, dejarlo salir.

Nunca estoy del todo contento con nuestro trabajo, me parece que es normal intentar crecer. Estamos buscando nuestro propio camino. Para mí lo más importante es hacer pensar a los espectadores. En nuestras actuaciones a menudo hay una historia, no es simplemente danza, queremos hacer un espectáculo plástico».

Una historia de dos

Bailan Masha Kozlova y el líder de Apache CREW, Tolik Sachivko.

Megalópolis

«Megalópolis» – el último espectáculo de una acta de Apache CREW.

«Durante este año de trabajo, me he estado preparando a que un día tendríamos que hacer algo más ambicioso que los habituales vídeos de 7 minutos de duración. Decidí que debe ser sobre algo que veo todos los días, algo que me haga sentir y pensar. Así que se me ocurrió la idea de contar la historia de una ciudad a través de historias de diferentes personas.

Megalópolis es, quizás, como una «ciudad del pecado». Es como Nueva York, pero los acontecimientos representados en el espectáculo pueden ocurrir en cualquier sitio. Por lo tanto, es más bien una ciudad ficticia. Nuestro «Megalópolis» también es un poco exagerado y los personajes tienen poderes de superhéroes.

Nuestro equipo está formado por diferentes personas y tipos, y como yo no puedo estar seguro de quién exactamente estará involucrado en el espectáculo (al fin y al cabo somos una organización sin fines de lucro), el resultado dependerá de la gente que querrá participar. Ellos me inspiran, y yo, a su vez, intento encontrar un trato especial para cada uno, siento qué papel le conviene, y, basándome en eso, asigno los roles. No puedo percibir a los bailarines como una masa, no son porristas».