El coleccionista, Ihor Pereverniuk, cuenta:
Olga Navrotska se está probando un traje de inicios del siglo XX, típico para el Raión de Borshchivskyi, la óblast de Ternopil, que pertenecía a Podillia Occidental.
El cuello de Olga está adornado con unas perlas. Este tipo de adornos era muy caro y se transmitía de generación en generación como una dote. Cuando en una familia nacía una niña, la llevaban a una iglesia para bautizarla y enseguida empezaban a reunir una dote para ella.
Las chicas llevaban pendientes tal y como ahora, en cambio las pulseras se llevaban en la Edad Media, mientas que en los siglos XIX y XX ya no estaban de moda.
En particular, los pendientes, que lleva puestos Olga, tienen una historia interesante. Fueron encontrados por casualidad: estaban enterrados en la huerta de un etnógrafo de Ternópil. Se supone que fueron escondidos por alguien de sus antepasados. El adorno fue encontrado tan solo hace unos años.
Ahora fíjense en el bordado, el bordado negro era típico para Podillia.
La chaqueta está hecha de terciopelo y está bordada en puntada de satín. La moda de las chaquetas y de la puntada de satín era el resultado que tenía el impacto de las tendencias urbanas en la moda de las regiones campestres. Este tipo de vestimenta se hizo popular en los años 20 del siglo XX.
Bordar una manga de camisa como esta podía llevar un invierno entero o uno y medio, porque aquí utilizaban muchísimas pequeñas puntadas y técnicas: punto cruz, punto media cruz, de abalorios y otras. A su vez una chaqueta como esta se podía bordar en tan solo una semana y media. Esta camisa está bordada en lana fabricada y teñida manualmente. La corona está hecha de plantas mirto y vinca.
En aquella época, una mujer joven debería taparse y podía enseñar solamente su cara y sus manos y en un verano caluroso un poco las piernas. El calzado servía de muestra de prosperidad. Los ricos llevan botas y zapatos, mientras que las personas corrientes tenían solo uno o dos pares de zapatos para toda su vida.
Por ejemplo, para llegar a la iglesia, la gente se ponía postoly (antiguo calzado) u onuchi, que era un trozo de tela que se enrollaba alrededor de la pierna y solamente antes de entrar en la iglesia, se cambiaban y se ponían zapatos buenos.

La gente visitaba la iglesia cada domingo y los días festivos y para esta ocasión se ponía la mejor ropa y calzado que tenía en su armario.
El traje y los adornos de la colección de Vera Matkovska, la corona es una reconstrucción de Patoka Studio, los collares de la colección de Olena Buhaichenko.
Fuente: Ukrainska Pravda, la foto de postoly.
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